Como no creo que Giraldus estuviese equivocado veamos cómo se puede solucionar el problema de las sillas y las ciudades. En un diccionario de irlandés podemos ver que cathair tiene dos valores relacionados, silla y trono o sede real (capital), los mismos que el latín cathedra, que además de silla tuvo el significado de sede religiosa.
En las lenguas celtas y romances encontramos términos evolucionados con una u otra especialización y procedentes, según creo, los dos, del latín cathedra:
- silla: kadeir / cadair (galés), cadeira (gallego-portugués), kaer / kair (galés de Giraldus), chaire (francés) --> chair (inglés).
- sede religiosa o política, ciudad: cathedra (año 569, "Cathedram Bracarensem"), caer (galés), cathair (irlandés), chaer (bretón del siglo IX: "Plebs Chaer"), ker- / kar- (bretón actual).
"Ní bía cell na cathair cáidh
ní bía dúnadh ná ríghráith"
No quedará iglesia ni cátedra
ni fortaleza ni ciudad real
Cathair tuvo, por tanto, un primer significado equivalente a "sede religiosa" probablemente de un monasterio, de acuerdo con la primitiva división eclesiástica. Posteriormente adquiriría el significado de simple ciudad.
Sillas o sedes, asientos del poder religioso o político, no será muy difícil decidirse en los textos por uno u otro significado. Además, como orónimo, habrá que contar con el caso del Kaerarthur de Giraldus y otros muchos como Serra da Cadeira (Lugo), motivados por el rasgo semántico "elevado, prominente" presente en el étimo cathedra.
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