sábado, 5 de abril de 2014

Monte Eixil

 Para Eixil

Antes de recurrir a etimologías que parten de antropónimos utilizados como nombres de posesores que acabarían denominando un lugar, soy partidaria de indagar otras soluciones basadas en las particularidades orográficas o históricas del terreno. Lo cual no implica que no existan los nombres de posesores en toponimia, pero en mi opinión no hay tantísimos como se proponen.

En el caso del monte Eixil de Cedeira, donde se sitúa la garita o vixía de Eixil, el orónimo podría provenir del latín vigilis, "lucerna vitrea", (Du Cange, sub vigilis), es decir, faro o vigía, centinela. Dentro de la frase "monte Vigili" (monte da Vixía), y por fenómenos de fonética sintáctica, la semiconsonante w en posición intervocálica podría haberse debilitado y acabar por desaparecer, lo que nos dejaría un supuesto *monte Igil > Ixil, o Eixil, por contagio de la -e final del sustantivo monte.

En un derrotero por las Antillas, a donde sabemos que se trasladaron gran cantidad de topónimos procedentes de la península, se menciona la Vigía de Igil, probablemente nombrada así por algún marino de origen cedeirés en un momento en que el topónimo no se había convertido, por fonética sintáctica, en Eixil (Derrotero de las islas Antillas..., 1837, 3ª ed).

A esta serie de la familia del latín vigilis pertenecerán el Vixil de Boqueixón, nuestro Eixil, y probablemente alguno de los numerosos Xil, por aféresis.

El uso del término vigilis en el sentido de atalaya, faro, vigía, parece desprenderse del testimonio del año 1124, "per castrum de Uigil" (Mondoñedo. Fuente: CODOLGA).

2 comentarios:

Carlos Arias dijo...

Un pracer comezar a semana cos teus comentarios, Andregoto!
Apertas

Andregoto Galíndez dijo...

Un bico Carlinhos.