sábado, 28 de abril de 2018

Salto del Gitano

Río Tajo a su paso por el Parque Natural de Monfragüe. (C) Dolores González de la Peña, 2006.

El Salto del Gitano recibe su nombre probablemente del latín Saltus Ilicitanus, "sotobosque de encinas". Así pues, es un derivado de ilex, "encina". La etimología nos conduce al antiguo concepto de lucus o nemeton, el bosque sagrado de encinas, que pervive en la actualidad bajo la figura jurídica del Parque Natural.

Por otro lado, y aprovechando el lugar: el orónimo de Cerro Gimio en el mismo parque, podría provenir del latín eximium, "elevado" (como había propuesto en 2005: Celtiberia.net).

martes, 24 de abril de 2018

A Gadaña

A Gadaña es el nombre de un pequeño río de Vigo, y el de un afluente del Miño por su izquierda a la altura de Monção, A Gadanha. A pesar de documentarse este último como "Equitanie" en el s. X (pseudolatinizacion aprovechada por Almeida Fernandes para proponer la posibilidad de que fuese un río vadeable a cabaĺlo), ambos parecen resultado de la frase latino-vulgar "aqua de" seguida del hidrónimo prerromano ANA, como en Guadiana u Odiana (antiguo nombre del río en Portugal). En éstos y en otros casos como Odemira y Odeleite se aprecian indicios de haber sido hidrónimos formados a partir de evoluciones divergentes del sintagma aqua de, equivalente al clasico flumen (cfr. "aqua de Mira" en Ourense, año 1001). Todo esto dicho sin apenas perjudicar a la numerosa hidronimia de origen árabe existente en la Península.

La pequeña prueba de que A Gadanha es un hidrónimo híbrido de la base prerromana ANA precedida del segmento "aqua de", la proporciona su nacimiento en Anhões, lugar donde se repite la misma base hidronímica en virtud de la tendencia a la persistencia de los hidrónimos a lo largo de todo el cauce de los ríos.

domingo, 22 de abril de 2018

De Fonmiñá a Caminha

Esta pareja de hidrónimos nos permite, con carácter excepcional, recorrer la cuenca fluvial del Miño desde su nacimiento hasta su desembocadura en el mar, señalados ambos por nombres de lugar que aluden, tras un pequeño examen etimológico, a los dos hitos principales de su cauce: la cabecera en Fonmiñá (< Fonte Miniana), y la foz en Caminha.

La primera mención al topónimo Caminha la encuentro en un texto interpolado y reconstruido que describe uno de los condados de la región portuguesa de Entre Douro e Minho. La intención del texto es probablemente ubicar la desaparecida sede episcopal de Britonia en Bertiandos, no obstante, la toponimia y la demarcación parecen correctas:

"Primus comitatus ad locum caput Minei oritur, ubi intrat fluvius in mare & fluvius Froylanus in Minium. Inde deducitur ad ostium & et caput fluminis Limiae per ripa maris. Inde per illam aquam supra usque Britiniam, sive ad locum ante Britonia. Inde ad Penam Maiorem super civitate antiqua de Labrugia, quae modo dicitur Romariganes. Inde per terminum Froylani usque ad castellum parvum Tyde, quod dicitur Valentia. Inde per illam aquam Minii unde primitus inchoavimus, qui terminus sive collatio ita descripta, ad Britoniam civitatem jam destructam olim pertinebat, nunc vero partim ad caput Minii, partim ad oppidum Limiae, praeter cautum illud magnum, quod Reges olim dederunt, Monasterio Maximo, sito in illo editissimo monte Arga" (Colecçam dos documentos... da Academia Real da Historia Potugueza, 1728).

El territorio comenzaba en el lugar de caput Minei donde el río entra en el mar, de ahí por la costa hasta la desembocadura del Lima, y seguía el curso del Lima hacia arriba hasta Bertiandos, desde donde se metía hacia el norte por Romarigães y Labruja hasta Valença, dejando en el centro la Serra de Arga. Todo esto perteneció a Britonia, pero una vez destruida, ahora parte pertenece a caput Minii y parte a Viana do Castelo (¿?), excepto un couto en el monte Arga, donde se situaría el Monasterio Máximo.

Ese lugar de caput Minei es sin duda Caminha (1), donde el río Miño entra en el mar. Resulta curiosa, aunque no tanto si una se va al diccionario de latín, la utilización de caput fluminis con el sentido de desembocadura de un río. Por otra parte, la reducción de caput, "extremo, fin", a ca- en composición se observa en otros casos fosilizados en la toponimia, como caput vallis > Caballo (Navalcaballo - Toledo) o caput stagnum > Castaño (Fonte do Castiñeiro - Lugo, de donde arrancaba el acueducto romano de la ciudad).

Fonmiñá y Caminha presentan, así, un caso único en que se conservan los términos latinos fonte, "nacimiento de un manantial", y caput, "desembocadura", en la toponimia de una misma cuenca fluvial

(1) Opinión ya formulada en 1743 por el párroco de Vilar de Mouros João Affonso de Souza (Portugal antigo e moderno, v. 3, pg. 397), que se oponía a la hipótesis de que el topónimo proviniese de un supuesto nombre de posesor llamado Caminio.

sábado, 21 de abril de 2018

San Juan el Verde: Silvano


H.oguera o arbolón (uso los términos asturianos) en São João de Longos Vales, Portugal.
(C) XNPV, 2009.

En el norte de Portugal todavía se le sigue rindiendo culto a Silvano, transmutado en San Juan, plantando un largo tronco de pino al que se le han quitado todas las ramas. Como en Asturias, el árbol puede vestirse con cintas de colores, o figurarse el adorno con franjas pintadas. Este San Juan no es el Bautista, sino San Juan el Verde, trasunto de Silvano, la divinidad romana de los bosques y la vegetación (< del latín silva, "bosque, selva") y en cualquier caso, el árbol es la milenaria forma de representarlo, pues se trata de una divinidad dendrófora o portadora de una rama.

Examinaremos de cerca la doble transmutación de Silvano en San Juan. La toponimia del tipo Seivane o Seoane / Xoane (Ferrol) podría guardar relación con derivados del latín silva, "bosque", si nos atenemos a la posible vocalización de -l en posición final de sílaba (cfr. p. ej. seuva, "bosque", en Ribagorza), aunque sea más frecuente encontrarse con topónimos como Silvaescura, equivalente galaico-portugués de la Selva Negra alemana, en los que no se observa vocalización de -l. Los nombres de lugar Seivane o Seoane (< Silvani o Silvanae) designarían, por tanto, los tupidos bosques consagrados a Silvano o las silvanas (selvas).

Pasando al nombre propio del dios Silvano, y aplicando la posible vocalización de -l, obtendríamos Sejuan o Sejuão, que acaba por adaptarse como San Xoan / Xuan o São João con el cristianismo, pareciendo que se trata del Bautista, y sin embargo su carácter de divinidad pagana del bosque se pone de manifiesto con la pervivencia señalada de la costumbre de plantar este pino enhiesto que lo representa como árbol, y con el determinativo San Xuan Verde (conservado en Asturias), una clara referencia a la vegetación.

La evolución fonética propuesta, que en líneas generales se puede presentar así, Silvano > Seiuán > Xuan, podría aplicarse igualmente a la toponimia gallega del tipo Xoana y a la controvertida etimología de la Xana o Xuana asturiana, personaje mitológico que se ha querido vincular con Diana (Aurelio de Llano Roza de Ampudia, Constantino Cabal), y que no sería otra cosa que una Silvana o divinidad menor de los bosques.

En la iconografía a menudo se representa a Silvano acompañado de un perro, animal que aparece en el folklore de Asturias como compañero de un San Juan dendróforo:

Veite, veite cercellín,
d’este valle pal vallín,
qu’ehí vien el Señor San Xuan
col so perru y el so can
y una vara de salgueiru
para dar al pigureiru
que guarde’l to carneiro.

Conjuro de San Juan recogido por Alberto Álvarez Peña,
Mitoloxía de los santos n'Asturies.


El último Bárbol de Fangorn confundido con San Juan el Bautista (SJB) por avatares de la etimología popular.

sábado, 7 de abril de 2018

As Cachadas

Existen varias etimologías propuestas para el topónimo A Cachada o A Escachada (Pontenova, A Gudiña), desde la de Rivas Quintas, que considera la toponimia del tipo Cacha variante de Casa, a la de Almeida Fernandes, que parte de una supuesta base latina *castulare, "arrotear, desbravar para a agricultura", pasando por las curiosas propuestas del Padre Sarmiento (Colección de voces y frases del gallego, pg. 252, ed. Pensado).

En todo caso hay que partir del significado que el verbo cachar tiene en gallego y portugués, "romper un terreno, cultivarlo" (Rivas Quintas), "quemar y preparar el terreno para sembrar" (Leandro Carré Alvarellos), poniéndolo en relación también con el verbo escachar, "romper", y por supuesto con las consecuencias de la rotura, los cachos y cachelos.

Con alta probabilidad estamos ante toponimia de origen medieval derivada de la institución germano visigoda de ocupación de las tierras mediante la presura, de praedo, "depredación, saqueo, captura". La ocupación o colonización estaba legitimada si se ejercía sobre terrenos de escalido o squalido (incultos, salvajes) con vistas a su aprovechamiento agrícola, y equivale al sistema de la aprisio o captura carolingia (Arribas Magro: Las Merindades de Burgos, 300 a.C. - 1560, pg. 188).

De este sustantivo supongo que se habrá formado el verbo escalidare o squalidare, que perfectamente evoluciona en gallego-portugués a escachar, "romper, roturar [las tierras]". Leo Wiener recoge la forma escachar < squalidare como propia del navarro (Commentary to the Germanic Laws, pg. 83).

En mi opinión la toponimia del tipo Cachamuíña también encajaría en el étimo que proponemos si partimos de un sustantivo elidido como en illas [terras] escalidas > As Escachas > As Cachas, por haplología o eliminación de sonidos contiguos similares. De la forma en plural reducida surgiría el singular A Cacha, Cacha, que habitualmente se acompaña del nombre de su propietario: Cachalvite (Alvitus, en genitivo), Cachaldora (Ilduara).

El mismo fenómeno de haplología o reducción intervendría en la formación del participio desde el verbo escalidare > escachar: As Escachadas > As Cachadas, deduciéndose posteriormente la forma en singular A Cachada.

El primer documento, aunque tenido por falso, de una presura data inequívocamente del año 712 (Escrituras de varios monasterios, MSS/18387 de la BNE, f. 233v) y es la que lleva a cabo el obispo Odoario, que, procedente de África, se establece en Lugo con su familia justo en el momento de la invasión árabe de la Península.

Toponimia As Cachadas, A Escachada, A Cachada, según la base de datos Toponimia de Galicia. 

La distribución de la toponimia Cachada mostraría tal vez el sistema de adquisición o captura de terrenos de escalido alrededor de las diócesis de Tui e Iria como consecuencia de las repoblaciones efectuadas tras la extinción del reino suevo de Gallaecia; o quizá la previa expansión del reino suevo desde la Gallaecia Bracarense hacia el norte, en el siglo VI, mediante la creación de nuevas sedes episcopales (Tui, Iria) y la apropiación de terrenos de escalido.


La superposición de la toponimia A Tomada en la misma área incide en la apropiación de territorios mediante el sistema de presura, circunscrita a la zona de expansión del reino suevo de Gallaecia.

domingo, 1 de abril de 2018

Regreso a Rodinia


Reconstrucción de los paleocontinentes que formaron Rodinia, según Torsvik.
(C) The rootless variscan suture of North-West Iberia (Galicia -Spain). Conference abstracts and field trip guide. Ed. Arenas, Martinez Catalá, Abati y Sánchez Martínez, Madrid, Instituto Geológico y Minero, 2007. Mapa en la pg. 48.

Hace 1.100 millones de años los continentes que acabarían uniéndose para formar Rodinia, un supercontinente que precedió a Pangea, se disponían como en la reconstrucción de Torsvik: al este del dominio continental de Amazonia y África Oeste existía un sistema en arco conformado por las islas de Avalonia y Cadomia.

Las rocas de anfibolita de O Purrido (Ortegal), cuyos circones arrojaron dataciones uranio-torio de hasta 1.658 millones de años antigüedad, son las más antiguas de la Península Ibérica. Según se expone en la bibliografía citada, se fijaron a la costa del paleocontinente Amazonia-África Oeste por la presión ejercida por parte del sistema insular en arco (islas de Avalonia y Cadomia). Tras el ensamblaje de todos los paleocontinentes en el supercontinente de Rodinia, O Purrido continuó ocupando la costa.

Millones de años después, la fragmentación continental de Rodinia en otros paleocontinentes de formas distintas, situó a O Purrido en la costa norte de Gondwana, continuando cara al mar. La historia geológica de Galicia está ligada al mar desde hace millones de años; y aún nos queda mucho para llegar al famoso supercontinente llamado Pangea, que se disgregó en las formaciones continentales actuales, pero voy a abreviar, una vez que situamos las anfibolitas de O Purrido en Rodinia hace 1.000 millones de años.

Las anfibolitas de O Purrido, las rocas más antiguas de la Península Ibérica, son tan antiguas que no pertenecen a nuestro continente (geológicamente). Se caracterizan por ser muy duras, densas, oscuras, compactas y muy pesadas, con algo de metálico. No es un soporte que se pueda trabajar con facilidad, y sin embargo, hace 300.000 años un ser humano que vivía en la zona de Vixía Herbeira recogió una de estas piedras en aquel territorio, resto de la vieja y desaparecida Rodinia. Sobre ella talló un bifaz de unos 25 cm de largo y más de 2 kilos de peso. Y hace nada, otro ser humano encontró la herramienta lítica tallada hace 300.000 años sobre una roca formada hace 1.100 millones de años en un paleocontinente disgregado o desaparecido.


Bifaz de Vixía Herbeira. El único que ha aparecido hasta ahora en la comarca de Ortegal, presenta una rotura en el filo derecho, producida tal vez durante su talla, o posteriormente por meteorización. (C) Dolores González de la Peña.

Hoy la hemos depositado en el Museo de Historia Natural de Ferrol por tratarse de una anfibolita que completa la estupenda sección del museo dedicada a los minerales de Ortegal. Podríamos preguntarnos si se trata del bifaz más antiguo del mundo, evidentemente por la datación del soporte (anfibolita de Ortegal c. 1.658 millones de años), no por el momento en que fue tallado por la mano del hombre (c. 300.000 años a.C. basándonos en nuestros rudimentarios conocimientos de tecnología y tipología lítica).

Momentos previos al depósito de la anfibolita en el Museo de Historia Natural.
(C) Dolores González de la Peña.