Apenas se encuentra información sobre el origen de este topónimo coruñés, salvo un artículo en el diario La Opinión, en donde se formulan como posibles etimologías su relación con algún indiano retornado procedente de Perú, al que llamarían "O Peruleiro", o que el microtopónimo proceda de la fusión del antropónimo Pedro Leiro, supuesto habitante del barrio. También se recoge la de Eladio Rodríguez, que reduce el significado del término a "altura, lugar elevado".
Lo cierto es que el Peruleiro se sitúa en una pequeña elevación, perceptible desde el Paseo de Ronda con Virrey Osorio. En su cumbre se recorta contra el cielo el edificio del Centro Meteorológico Territorial al que se accede por una escalinata de más de cien peldaños; fue construído en los años 30 del siglo pasado como parte de la Ciudad Jardín, que recrea la arquitectura de indianos (cfr. el odónimo Paseo de la Habana). Dado que el Centro Meteorológico ocupa el edificio desde que se finalizó su construcción*, resulta bastante difícil sostener que los vecinos se la atribuyensen a algún emigrante retornado del Perú ("O Peruleiro").
Como la colina se caracteriza por abundar en ella los afloramientos graníticos, es más probable que el topónimo sea un derivado en -eiro del romance pérula / pérola, "piedrecilla", forma diminutiva procedente del latín petra, "piedra", más sufijo diminutivo -ulus, -ula, -ulum. En gallego-portugués pérola ha evolucionado desde el sentido de "piedrecilla" al más especializado de "perla".
En resumen, un peruleiro o peroleiro sería, como topónimo, un orónimo referente a un lugar abrupto abundante en afloramientos pétreos.
Una de las subidas al Peruleiro, que todavía conserva la antigua escalera;
junto a ella un enorme bolo granítico cortado para facilitar el acceso.
Afloramiento de granito en la loma del Peruleiro.
Viejo barrio del Peruleiro: calle de Camiño Pinar.
* "Un observatorio con solera", La Voz de Galicia, 14/3/2006. Agradezco a Pancho Gallego la referencia a este artículo.