En el nº 12 del Boletín del Instituto de Estudios Vigueses de 2006
Costas Goberna y de la Peña Santos daban cuenta de una curiosa noticia que
encontró en La Voz del Tecla de 1914 Xoán Martínez do Tamuxe: unos buscadores de tesoros que seguían las instrucciones de un
Ciprianillo -donde se afirmaba que "de la parte de allá del río Vilar, y
dentro de una roca, marcada con un barco y dos ancletas, se encontraba
un valiosísimo tesoro"- hicieron volar la piedra provistos de pólvora y
barrenas. Con esta noticia se explicaba el misterioso deterioro de la parte central del
casco de la embarcación del petroglifo de Oia.
Barco de Pedornes, Oia. (C) Onnega 2007 para Celtiberia.net.
Recientemente,
en As Fádegas (Ribadeo), el colectivo Mariñapatrimonio ha encontrado unos
petroglifos podomorfos (As Pisadas do Encanto) y unas cazoletas al final de la
senda de pisadas. Para el catedrático de Historia de la USC, Marco García
Quintela, en este enclave se estaría representando "una sucesión de
pisadas humanas que se acaban transformando en rastros animales" (Astrónomos
de la Edad de Bronce, Silvia R., El País, 5 de marzo de 2013). En
particular el profesor se inclina por la posibilidad de que sean huellas de
oso: "en la parte superior de las cazoletas están claramente talladas cinco
garras [...]. Podrían ser de oso, pero también de otro animal".
Posible cazoleta con forma de huella de oso en As Fádegas, As Pisadas do Encanto. (C) Mariñapatrimonio.
La extremada rareza tipológica de esta cazoleta, que no se parece en nada a los petroglifos de coviñas, de forma semiesférica o cóncava y superficie muy pulida, me hace sospechar que sea una consecuencia más de la lectura de los Ciprianillos, que fomentaban la búsqueda y el expolio de los tesoros ocultos por los gentiles. ¿Y por qué se les habría ocurrido a aquellas mentes calenturientas piquetear la roca en busca del oro escondido precisamente en As Fádegas? Muy probablemente porque aquí, antes de haberse descubierto ahora los petroglifos podomorfos, ya existía una leyenda local sobre el Encanto que habitaba el lugar; una leyenda que, a su vez, estaría motivada por los podomorfos, visibles hasta que con el paso del tiempo se depositó sobre ellos esa capa de sedimentos que ha vuelto a retirar hace poco la riada.
En estos falsos grimorios se incluían listas de lugares con tesoros por el simple hecho de que en ellos hubiese un petroglifo, considerado una señal utilizada por los mouros para marcar su escondite: "En el medio de la cruz de Gañado está una lanza de oro y dos alabardas
debajo de una piedra que tiene rascado un pie de caballo" (Gran libro de San Cipriano).
Si acabase por demostrarse, no obstante, que estas cazoletas de As Fádegas son representación de huellas de animales, convendría repasar a los agrimensores romanos: Terminus sive petra naturalis, si branca ursi habuerit, lucum significat = Si en un cipo divisorio o en una piedra natural se representara una garra de oso, significa (el comienzo de) un bosque (Alicia M. Canto, La piedra escrita de Diana en Cenicientos, Madrid, y la frontera oriental de Lusitania, 2007, Celtiberia.net). Y aunque la profesora Canto traduce aquí lucus por un simple "bosque", no olvida a lo largo de su artículo recordarnos el carácter sagrado de estos bosques.
En el caso que nos ocupa, la garra de oso de As Fádegas podría estar señalando un lucus consagrado a su Encanto, divinidad femenina de la naturaleza trasunto de la Diana romana. Una xana.
En cuanto a los podomorfos y la leyenda del Encanto: las huellas fosilizadas (icnitas), bien sean animales o humanas, así como algunas figuras que aparecen en la piedra por meteorización, se asocian constantemente a hierofanías o manifestaciones de la divinidad, y aparecen en la mitología de todos los tiempos y lugares. Para saber más sobre el tema recomiendo The folklore of footprints in stone: from classical antiquity to the present, de Mayor y Sarjeant, o Principles of ichnoarchaeology, de Andrea Baucon y otros.
En cuanto a los podomorfos y la leyenda del Encanto: las huellas fosilizadas (icnitas), bien sean animales o humanas, así como algunas figuras que aparecen en la piedra por meteorización, se asocian constantemente a hierofanías o manifestaciones de la divinidad, y aparecen en la mitología de todos los tiempos y lugares. Para saber más sobre el tema recomiendo The folklore of footprints in stone: from classical antiquity to the present, de Mayor y Sarjeant, o Principles of ichnoarchaeology, de Andrea Baucon y otros.
Pegadas de Roldán, San Vitorio (Aranga). (C) Ángel Facio para Celtiberia.net, 2007.
2 comentarios:
A procura do ouro continúa:
http://cultura.elpais.com/cultura/2013/03/08/actualidad/1362778464_149081.html
Vai quedando polos despachos, polos silencios, pola pasividade?
Bicos
Cossue, aproveito para felicitarvos pola vosa filla, quixen deixar un comentario no teu blog e non fun capaz. Ten un nome xermano moi bonito, non esperaba menos ;) Parabéns!!
Carlinhos, un bico.
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